Quiero contarte una historia, hecha de sueños mas que de sacrificios, pues el hecho de ahondar en la interpretación de la música folclórica y sus misterios (a los que dediqué casi toda mi vida) seria si, un dulce sacrificio.
Nací hace ya algunos años en un humilde barrio de la periferia de la ciudad de Santiago del Estero , rodeado de gente que a su pobreza material la contrarrestaba con algo que no tiene precio , que le podemos llamar nobleza espiritual, eran laburantes, divertidos y por sobre todo tenian un sentido de la amistad, de esas que solo se escriben con mayúscula.
Hoy a la distancia y en otro paisaje los veo y me veo jugando en esos inmensos patios de tierra , bajo la sombra añosa y protectora de los algarrobos y la mirada siempre atenta de una persona mayor.
Alli en Villa Hortensia (que hoy le llaman ...) , aún pequeño pulsé por primera vez una guitarra que pertenecía a mi tío Segundo Isidro Paz, la pobre quedaba a mi merced cuando el salía a trabajar en el aserradero.
Me enamoró su voz y se fue haciendo cada vez mas fuerte la necesidad de robarle sonidos a ese madero encordado, cuando pegado a la antigua radio "Serra" trataba duramente de copiar los ritmos y punteos que ella transmitia ...Aquella y por mucho tiempo , fue mi primera y única guitarra.
En una modesta casita vivímos parte de la infancia con mi familia , mi madre nació a la orilla del Cachi Mayu (Rio Salado) en un paraje denominado Quimilíoj.
A ella le dedicamos con el poeta Guido Orlando Avila una chacarera cuyo estribillo dice :
"Creció junto al Cachi Mayo
chinita linda y risueña ,
la vieron pasar los años
shalaca y bien Santiagueña".
María Salomé Avila de Almada
Vaivén de Remolinos - Chacarera
Autor : Juan Carlos Almada
La grabé en mi segundo trabajo discografico como solista"Fletero de Lunas". ¡ Cuanta ternura junta puede tener una Madre!
Mi padre vino tambien del interior de la provincia, de otro paisaje tan duro y agreste como el anterior, pero ala vera del "Mishqui Mayu" (Rio Dulce) ambas zonas quichuistas donde tenia su rancho mi recordada abuela Delina, la unica que conocí y amé.
Este rio supo de todo sueño y esperanza de ese niño que ya de mozo fue a radicarse a la ciudad.
Allí fue carpintero, cochero de mateos, albañil (para construir su casa), peluquero privado de sus hijos y policia sumariante,de lo que se jubiló.
¡Que no pudo hacer este hombre para cuidarnos y educarnos !
Mientras mi madre se ocupaba de las siempre duras tareas de la casa.
A veces le pregunto a Dios ¿porque le hace tan duro el camino a la gente buena?
